El pasado fin de semana, Georgia Holt, la madre de Cher, fallecía a los 96 años, dejando devastada a la diva de la canción, que apenas si escribía en Twitter un sencillo "Mamá se ha ido" con el que daba a conocer la muerte de quien había sido uno de sus grandes apoyos a lo largo tanto de su vida como de su carrera artística. Ahora, la cantante de éxitos como Believe ha dado más detalles sobre cómo se encuentra ella y cómo fueron las últimas horas de vida de su madre.

También usando su red social favorita, donde se había comentado que Georgia había pasado semanas atrás varias veces por el hospital, una de ellas por un cuadro de neumonía, la cantante de 76 años ha preferido romper muy pronto su silencio y salir al paso de cualquier rumor, comenzando por los agradecimientos por las muestras de cariño.

"Mi madre estaría muy feliz de ver cómo personas de todas partes del mundo están hablando de ella con amor y admiración", comienza diciendo Cher, en esa ya típica forma que tiene de expresarse en Twitter omitiendo palabras enteras por emoticonos.

Cher defiende su relación con Alexander Edwards, 40 años menor que ella y con un pasado marcado por las infidelidades

"Lo cierto es que yo me convertí en el altavoz de los sueños de mi madre y los hice realidad. Ella no podía decirlos en alto, así que lo hice yo por ella y, de paso, la hice feliz. Mi hermana Gee fue la brillante. Y yo el patito feo que se convirtió en cisne", continuó Cher, que poco después tuiteaba que no estaba "pudiendo dormir bien".

Este martes, confesaba: "Lo cierto es que ella había estado enferma y recuperándose. Luego se puso peor, sentía muchísimo dolor. Decidimos finalmente ir al hospital. Pero para cuando llegamos, la mujer que había sido esa madre de la hostia ya no estaba con nosotros". Tras sus palabras, decía que se había vuelto "una dormilona".

Por último, la madrugada de este miércoles al jueves ha continuado sincerándose. "Quizá suene extraño, pero mi madre estuvo tan enferma durante tanto tiempo y tuvo un dolor tan constante que, creo, ahora es libre", ha dicho la artista.

"Me voy a ir a uno de nuestros lugares favoritos y voy a homenajearla allí. Cuando yo muera quiero que la gente haga una celebración, una fiesta", ha agregado Cher, antes de decir que su madre era "guapa, con talento, graciosa" y, en definitiva, "la hostia". "Ella me marcó el camino a seguir y sí, a veces nos peleamos y dejamos de hablarnos, porque ambas éramos duras, mujeres fuertes", ha añadido, no sin antes dejar una pequeña anécdota.

"Lo que es de verdad raro es que hace un par de meses me estaba despertando diciendo: 'Quiero a mi madre, quiero a mi madre'. Y quizá justo hace una semana dejé de decirlo", ha finalizado la cantante.